* Si yo se que tú eres, y tú sabes que yo soy, quién va a saber quien soy yo cuando tu no estés.
La mayoría de las personas que han estado cerca la muerte, debido
a una enfermedad o un accidente, confiesan que su vida ha tenido
cambios radicales, los cuales se convierten en un nuevo renacer al
mundo terrenal. Por lo que piensan que no vale la p
ena vivir una vida que no los llena completamente.
Al parecer un gran porcentaje de la población mundial no está satisfecho con la vida que lleva y esa insatisfacción parece tener los mismos motivos. Según un artículo realizado por Bonnie Ware, quien durante años ha trabajado atendiendo enfermos terminales, escribió “Los lamentos de los moribundos”, en el que toma los cinco principales motivos de arrepentimiento de las personas que tienen ya sellado su destino.
Por su trabajo, a Bronnie Ware le ha tocado ver a muchos pacientes enfrentar su propia mortalidad. “Cada paciente encuentra su paz antes de partir” dijo, pero se sorprende de ver como muchos se lamentan por las mismas razones:
Estas son las 5 cosas más comunes de las que se arrepienten los pacientes antes de morir:
“Ojalá hubiera tenido el coraje de vivir una vida fiel a mí mismo, no la que los demás esperaban de mí"
La mayoría de la gente no había cumplido aún la mitad de sus sueños y tuvo que morir sabiendo que era debido a las elecciones que otros habían hecho por ellos.
“Me gustaría no haber trabajado tan duro”
Esto predominó más en pacientes de sexo masculino. Echaban de menos la juventud de sus hijos y la compañía de su pareja.
“Ojalá hubiera tenido el coraje de expresar mis sentimientos”
Muchas personas suprimieron sus sentimientos con el fin de mantener la paz con los demás. Como resultado, se conformaron con una existencia mediocre y desarrollaron enfermedades relacionadas con la amargura y el resentimiento.
“Ojalá hubiera pasado más tiempo con mis amigos”
La gente a menudo no se da cuenta realmente de los beneficios de los viejos amigos hasta a pocas semanas de su muerte, y no siempre fue posible localizar a esos amigos. Todo el mundo echa de menos a sus amigos cuando están muriendo. Todo lo que queda en las últimas semanas, es el amor y las relaciones.
“Me gustaría haberme permitido ser más feliz”
Muchos no se dieron cuenta hasta el final que la felicidad es una elección. Se habían quedado atrapados en los viejos patrones y hábitos. El miedo al cambio les hizo creer que estaban contentos.
La vida es una elección. Es su vida. Elija conscientemente, elija sabiamente, elija honestamente.
En conclusión, elijan la felicidad, pero recuerden que no existe la posibilidad de hacer felíz a otro si no se es felíz, y la felicidad es un estado de equilibrio que solo conoce el ser humano adulto que ha realizado un cierto nivel de integración en su personalidad, producto de un sincero y sistemático trabajo sobre si mismo.
Disfruten a sus seres queridos, díganles siempre lo que sienten y cuanto los aman, no teman al ridículo, aun si es alguien que no saben si les corresponde, como dice el dicho: "arrepiéntete de lo que hiciste y no de lo que nunca intentaste", trabajen, si, puesto que el trabajo te hace una persona con valor, pero no vivan para trabajar, ya que cuando el tiempo haya pasado, se darán cuenta de todo lo que dejaron pasar y a cuantas personas dejaron ir por pensar que el trabajo era primero y pensando que al final, seguirían esperándolos.
* La vida sigue su curso, tú toma parte de ella.
Fuente: paradisweb.org