Dedicado... a mi mejor amigo: mi perro Sandro...
* Un amigo verdadero es alguien que cree en ti aunque tu hayas dejado de creer en ti mismo.
Casi siempre se habla de los lazos que unen al ser humano, se habla de amor, de amistad, de lealtad... lealtad, aveces esa palabra no se conoce entre nosotras las personas, creemos que podemos llegar a ser los mejores amigos y nos traicionamos o hablamos mal unos de otros, creemos que podemos llegar a amar sin condiciones y profundamente, para después engañar, mentir y hacer daño, creemos que podemos ser los más confiables en el mundo, y traicionamos a quien nos da de comer o a quien nos tiene la mano... así es la naturaleza humana, pero, qué lazos se pueden crear entre un humano y un animal???
Aveces, cuando más solos nos sentimos, buscamos deseperadamente al amor verdadero, o al amigo sincero, pero ninguno
de ellos apararece, al menos no en el momento en que se desea, al menos yo nunca pensé en que Dios me escuchó enviándome un angelito que me cuida y me quiere por sobre todas las cosas, es mi paño
de lágrimas en mis momentos de pena, me acompaña siempre en mi soledad a cualquier momento no importa si es de día o de noche, siempre tiene tiempo para mí, qunque yo no tenga tiempo para
él.
Es parte de mi vida, en cada sonrisa, y alegría, puede ver a través de mi alma y sabe lo que siento y siempre está ahí para mí
incondicionalmente.
Sus ojos, son los más transparentes y sinceros que hay, han visto la mirada de los perros???, si no lo han hecho aún, háganlo, es una mirada tierna y sincera, carente de toda malicia, ese si es el reflejo del alma.
Es quien siempre me recibe con alegría y emoción, sabe que no soy perfecta y aún así me acepta tal y como soy, se desvive por agradarme y cuando lo reprendo por alguna travesura, nunca guardar rencor, vive por ganarse mi aprecio y mi cariño.
Los lazos que se crean entre los perros y los humanos, se llaman: "amor", "amistad" y "lealtad",, me enseña a vivir sin resentimientos y a aceptar a los demás como son, me enseña que el amor verdadero no es con hipocresías ni falsas promesas, , ni criticando o hablando mal de otros a sus espaldas, ni depende de una apariencia física o fingir quien no se es, no le importa si hoy luzco mejor que ayer, o si soy más rica o más pobre, ni siquiera si hoy estoy triste o enojada, siempre hay un buen pretexto para salir conmigo a dar un paseo así sean las 12 de la noche, o para iniciar un juego, o simplemente permanecer a mi lado en donde quiera que yo esté.
Me ha enseñado a apreciar el valor de la lealtad y a no olvidarme jamás de quien es importante en mi vida...
Es mi mejor amigo, mi compañero... mi perro.
Karina Peña.
* Lo más difícil no es morir por un amigo. Lo más difícil es tener un amigo por el que vale la pena m orir.